SALUDO DE BIENVENIDA DEL HERMANO MAYOR

Quisiera empezar este saludo de bienvenida, como no puede ser de otra forma, agradeciendo enormemente el gran trabajo realizado tanto por el Hermano Mayor que me ha antecedido en el cargo así como por su terna. Un agradecimiento mío y de toda la Cofradía por todo su esfuerzo. Gracias Paco, Pedro y Pedro Jesús.

De igual forma agradecer al nuevo Vice-Hermano Mayor y Administrador, Alfonso Ruiz y Luis Fernando Baeza, el haberse querido comprometer a este bonito reto e ilusión de guiar el camino de nuestra Hermandad durante los próximos años.

Para mi supone una gran ilusión a la vez que una gran responsabilidad presidir nuestra querida Cofradía, pues son muchos los recuerdos, anécdotas y en definitiva vivencias que a lo largo de mi vida he tenido la oportunidad de experimentar en el seno de la misma.

Creo sinceramente que lo más importante de nuestra Hermandad, o de cualquier otra, es el capital humano, las personas que la forman, los hermanos cofrades. En definitiva se trata de que convivamos y compartamos juntos ese precioso nexo de unión que hace que pertenezcamos a la Muy Ilustre Cofradía de la Caída, que no es otro que nuestra fe, amor y devoción por Cristo Caído y su Madre de la Amargura. Reflexionando un poco, que puede haber más enriquecedor y en definitiva más bello que tener a alguien con quien compartir aquello que nos apasiona, que mueve nuestra vida. Pertenecer y sentirse parte de una hermandad es tener una familia, una casa, un apoyo, un amigo. Es por ello que quiero invitaros a que compartamos con alegría nuestra pertenencia la Cofradía, que la Casa de Hermandad sea un lugar donde podamos acudir a encontrarnos con el resto de hermanos, a pasar un rato de convivencia y a mantener vivo ese sentimiento por nuestros titulares. Que cada culto o acto que se lleve a cabo constituya una oportunidad ilusionante para cada uno de nosotros de ir al encuentro de Cristo y María y de nuestros hermanos cofrades. Los logros y proyectos materiales que puedan alcanzarse llegaran sin ninguna duda si conseguimos la unión, participación y compromiso de todos los que formamos la Cofradía. Crear un ambiente de hermandad en el que todos nos sintamos felices de participar de la vida de la Cofradía, puede convertirse en el motor de grandes proyectos que poder llevar a cabo y que nos hagan a todos sentirnos orgullosos por lo realizado.

Por ello os invito y me haría muy dichoso el que siempre que haya una convocatoria para algún acto estuvierais presentes con la Hermandad, con Nuestro Padre Jesús de La Caída y María Santísima de la Amargura, sintiendo y compartiendo todos juntos la felicidad de pertenecer a algo tan grande y hermoso como es nuestra querida Hermandad.

Reiterándome en mi deseo de compartir este reto con todos vosotros, me despido con un fraternal abrazo en Cristo.

 

 

José Carlos Lindes Jurado

Hermano Mayor